jueves, 28 de julio de 2011

A estas horas...


Amanecía. En aquella playa, a estas horas de la mañana, nadie jugaba, hacía castillos de arena, chapoteaba, reía, tomaba el sol, se echaba crema, leía, dormía, hablaba, escuchaba música o esperaba nada. Porque a estas horas de la mañana, aquella playa permanecía desierta, a la espera de que hordas de turistas acudieran a ella, ansiosos por disfrutar de las mas estresantes vacaciones que uno pueda permitirse.

A éstas horas, las olas seguían su constante arrebato suicida, al estrellarse una tras o otra contra la arena, que pasiva e inamovible, observaba cómo las primeras se turnaban para dar fin a su efímera vida.

Y en éste paisaje, desolado, cálido, y cómo no, arenoso, se encontraba él. Cámara en mano, expresión seria por rostro, y tranquilidad por pensamiento, él se aproximaba al mirador, de nombre de pico de ave, aquel lunes, 1 de Agosto, donde sabía, no habría nada nuevo para él, el sol saldría por donde siempre, las olas, continuaran su extraño ritual suicida, y el ruido, cómo todos los días de agosto, acudirá a aquella playa de la mano de los turistas.

Y sin embargo, allí estaba él, cómo todas las mañanas, rogando a quien fuese que dirigía la realidad, sea una entidad de una u otra religión, que le diese una señal, que le indujese a pensar en lo que venía tras aquello, en que no todo acabaría tan aprisa cómo siempre.

Siempre el mismo cuento. Siempre el mismo final.

¿Por qué estaba aun allí?

Por que no hay mayor empeño que el que un ser humano, y él en especial, se profesa a sí mismo. Completamente convencido de que algo podía ser diferente en aquella ocasión, nada de lo que la realidad le dijese, mostrase o explicase serviría en absoluto para nada, pues éste es el problema de estar cómo el estaba.

Y a partir de esto, que cada cual lo interprete cómo más crea conveniente.

jueves, 21 de julio de 2011

Diario de a Bordo... Dias 2 y 3 en Londres

Dia 2

Comenzamos el dia muy arriba ya el sol (aunque oculto entre las nubes) hace un dia gris, tipico de Londres, humedo, y son mas de las 11... desayunar, preparar el dia, gastar tiempo sin hacer nada y tareas similares nos requiere varias horas.

Salimos de la casa de mi amigo, y mediante "the Tube" (el metro) nos dirigimos a la British Library, la biblioteca nacional, donde ademas hay varias exposiciones. Tras merodear un tiempo por la cafeteria y la primera planta de la biblioteca, comemos tomandonos nuestro tiempo en el hall de la biblioteca, en mi caso sandwich, zumo, patatas fritas y un cafe, y directamente entramos a la exposicion, que en este caso trata sobre "otros mundos y universos paralelos". Tras un par de horas en la exposicion, salimos y mediante el metro de nuevo, nos dirigimos a Baker Street, concretamente al 221 B, direccion del mas famoso detective consultor del mundo (Sherlock Holmes) y donde ahora se ubica un museo a dicho icono britanico (que por cierto, cierra a las 6, por lo que no pudimos entrar).

Y tras una visita a una tienda completamente dedicada a los Beatles, en dicha calle, nos dirigimos de nuevo a Oxford Street, y luego a Carnaby Street, la calle con mas glamour de Londres.

Y tras esto, a casita a dormir, que aunque no lo parece, ha sido un dia muy largo.

Dia 3

Esta vez levantarse temprano, y desayunar con prisas. Salir casi corriendo, metro, sentarse, esperar, levantarse, andar... y ver el Tamesis de nuevo.

Para comenzar la jornada, visita a dos exposiciones en el Desing Museum de Londres, seguido de viaje en metro a the O2 Arena, un gigantesco espacio de ocio, donde conozco a otro londinense, y comemos (aqui la gente se come las pizzas usando el tenedor...).

Y tras esto, ver la ultima de Harry Potter en 3D, en su idioma original.

Vuelta al metro, y al centro de Londres, y pasada rapida por el Shakespeare's Glove y St Paul's Cathedral, usando el Millenium Bridge como nexo entre ellos.

Tras esto... sorpresa, nos encontramos con la premiere de Horrible Bosses, una pelicula con Kevin Spacey, Jason Bateman, Jennifer Anniston... donde esta haciendo su entrada la actriz de Friends (Anniston). Nos hacemos paso como podemos, y camara en mano, hacemos todas las fotos que podemos del momento, en primera linea de camara, mientras decenas de profesionales nos ciegan con enormes flashes.

Despues de esto, comienza a llover, una lluvia que se torna torrencial... mientras, pasamos por el Nathional Theatre y el London Eye... al llegar a la estacion de metro, estamos tan empapados que cuesta moverse del peso del agua acumulada por la ropa. Ni siquiera hacian ya falta charcos, llevabamos agua dentro de los zapatos, y el sombrero, con tal cantidad de agua, se vuelve pesado y humedo, muy incomodo.

En el metro de vuelta a casa, esperamos que la ropa se seque, mientras la lluvia britanica golpea los cristales del vagon.

Por fin, vuelta a casa. Por fin, una ducha, agua caliente.

lunes, 18 de julio de 2011

Diario de a Bordo... Dia 1 en Londres

Aproximadamente las 4:15... aun no ha amanecido (y aun quedan horas para que esto pase)... con un ruido molesto me despiertan... con un segundo ruido se aseguran de que estoy completamente despierto... y trato de volver a dormir... me vuelven a despertar... me levanto... aseo, prisas, vestirse, prisas, revisar maletas, prisas... 4:45, salgo de mi casa, y me monto en el coche.

Viaje hasta el aeropuerto... segun el GPS, 1 hora y 9 minutos... segun yo, podrian ser desde 45 minutos a 2 horas, dependiendo de que partes del viaje recuerde.
Aparcan en el aeropuerto... varias vueltas para encontrar la entrada a la terminal... preguntar a una recepcionista medio dormida... algunas ganas... cruzarse la terminal completa buscando un puesto que no existe... bastantes ganas... hacer cola para que revisen la documentacion... muchas ganas... ver despegar una avion, o divertirse a un chaval, mientras sus padres se ocupan de los detalles del vuelo... no tiene precio.

Comprar libro para el vuelo, novela de policicas ambientada en la II Republica, beberse un cafe abrasandose la boca porque no tienes tiempo para dejar que se enfrie, y atraganterse a croissant... despedirse de los conocidos... atrvesar el control de seguridad... ya esta... todo queda detras de la barrera de tela... comenzar a andar... ver despegar un avion desde la terminal... buscar la puerta de embarque... hacer cola... que te denieguen el acceso por tener una maleta demasiado voluminosa... asustarse y... carrera a traves de toda la terminal hasta donde se pueden cambiar libras por euros para poder pagar los 40 € que me van a cobrar por llevar la maletita.

Con las prisas llegar el ultimo al autobus que os dirige hasta el avion... entrar en el avion... sentarse... esperar... esperar... acordarse de George Clooney en "Up in the Air"... esperar... notar la aceleracion del avion... notar como deja de tocar tierra... sentirse pesado... mas pesado... mas pesado... volar.

Llegar a un Londres frio, huumedo y gris... hacer mas cola... dejar que te revisen la documentacion... recoger el equipaje... hasta ahi, todo parece un viaje algo gris... encontrarte con un amigo que hace 365 dias que no ves... se te alegra el dia.

Buscar el coche del amigo por los diferentes parkings... aproximadamente media hora...

Y pasamos a la zona narrativa...

Nos montamos en el coche y  partimos hacia Londres desde Gatwick (el aeropuerto)... son momentos en los que es dificil hablar de algo... llegamos a Londres, despues de un largo paseo por zonas verdes y ciudades hechas con ladrillo clasico... de nuevo, la casa me deja impresionado, a la vez es un casa grande, voluminosa, pero acogedora y cerrada por dentro...

Dejo las maletas tal cual... y ahora si, ya podemos hablar... y basicamente, toca contarse, apoyandose en las fotos de Facebook, todo lo que cada uno ha hecho durante los 365 dias que los separan, por poca cosa que sea.

La diferencia de idiomas no ayuda, aunque si le da cierto toque de humor a cada cosa que se pretende transmitir.

Comemos y por fin, por fin... toca ver Londres... genial, y todo con dolor de estomago, tal vez una mala digestion...

La lista de sitios no es interminable, pero si bastante amplia

London's Bridge, Shad Thames, Tower Bridge, Oxford Street (la mayor calle de locales comerciales de todo Londres)... vista del Tamesis, visita a los edificios mas grandes que hemos podido encontrar, parada en aproximadamente 10 estaciones de The Tube (la red de metro de Londres, considerada la mejor de todo el mundo), por muchas de las cuales hemos tenido que pasar mas de una vez...

Y entre todo esto, y sin que se pase el dolor de estomago, y turnando la camara entre el bolsillo y la mano, algunas anecdotas que tal vez alguna vez, dentro de un tiempo, nos hagan reir...

Volver a casa despues de toda una tarde andando sobre y bajo Londres ha sido toda una experiencia, y despues de esto, creo poder asegurar que la mejor manera de conocer mucha gente simultaneamente es viajar en el metro londinense... tras esto, cenar con la familia de mi amigo... y hasta ahora, coger el ordenador ingles que no me permite poner cierta letra de tintes hispanos, y escribir este texto mientras oigo a mi amigo de fondo, tocar una guitarra propia de mi pais... aunque fabricada en China, en esta misma habitacion.

Ruego disculpen la poca calidad literaria y gramatical de este primer intento de diario de a bordo excusandome en el cansancio y en el hecho de que este ordenador no me permite escribir conforme dictan las normas de mi lengua natal.

miércoles, 13 de julio de 2011

¿Ya?

Tal vez ésto sea una reflexión, una serie de suposiciones, una pequeña mentira, una gran verdad, y muchas ganas de reaccionar... tal vez sea algo de ésto, tal vez nada, o tal vez todo... es una liberación.

Todo pasó deprisa, la situación, yo, se precipitó, me precipité, sí, y a la vez, todo lento... espera, paciencia, nervios, impaciencia... parada y bloqueo... falta de ideas, reacción rápida... dudas.

Solo me queda decir que no, todo no fue cómo esperaba, pero sí, me gustó, hasta el sabor amargo del final, una lección, una experiencia, conocerte algo mejor... vale, es optimismo inútil, pero no me molesta... todos estamos hechos para reaccionar, cada uno cómo puede...

Y sin embargo, no he conseguido dejar de darle vueltas... las dudas, ¿qué si no?
Si todo pasó así, si todo fue sinceridad... ¿que duda cabe?... la de la interpretación... oyes esto, piensas lo otro, y al final, únicamente recuerdas aquello que quieres recordar... pues bien, al escribir ésto, espero, dejaré momentáneamente el tema a un lado... aunque no creo que lo evite constantemente.

Y para finalizar, dejar claro... que todo, lo que dije, y lo que no llegué a decir es cierto, y que por mi parte, si alguna vez decides intentarlo, tratar de comenzar algo nuevo, la puerta queda abierta.